Ya está Nuestra Señora del Rosario en Sus Misterios Dolorosos ataviada de hebrea. En esta ocasión estrena el rosario de nácar de Jerusalén que le regalaron un grupo de franciscanos, y la Cruz de Jerusalén, regalada a nuestra Bendita Imagen por Curro Jiménez y Pedro Aranda el pasado verano.
Una vez más, Su vestidor ha puesto todo el esmero y cariño en este trabajo suyo de ataviar a la Madre de Dios, enhorabuena Paco, por tan buen trabajo.
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